jueves, 21 de octubre de 2021

Lección 47, Cuarto Grado, Primera Orden

 Cuarto Grado Primera Orden "Filósofo":

"El Sufrimiento en el Proceso experiencial"


O de cono lo grabado a fuego y sangre permanece indeleble para siempre.


Antes que nada debemos de recordar lo estudiado con anterioridad. Todo, absolutamente todo lo que nos acontece, bueno o malo, felicidad o dolor, nuestro Espíritu Santo lo determinó por escrito en el interior de su Astro; más concretamente, en la Cocina del Destino.


Al encontrarse la Personalidad, por regla general, desvinculada de su Espíritu Inmortal, es incapaz de comprender aquello que le sucede; pero sobre todo, aquellas que le provocan dolor y sufrimiento. Las buenas y bellas, pues bueno, aunque tampoco se comprendan son bienvenidas.


En algunos casos concretos de su Historia previamente escrita, el Espíritu ha deseado que ciertas experiencias sean de contenido profundo y quiere grabárkas en el Alma de forma indeleble y permanente. Eso se consigue con experiencias que provocan un terrible dolor y sufrimiento 

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Cuando la Personalidad, por miedo, ignorancia o desconocimiento intenta eludir los actos dolorosos programados, va en contra de su Espíritu y una y otra vez, de forma repetida, por mucho que se intente escaquear la Personalidad, los momentos para enfrentar dichas experiencia serán puestas ante nuestras narices.


Como ya vimos en la lección anterior, sólo existe un modo radical, por parte de la Personalidad, de acabar con el dolor y el sufrimiento, la Muerte Voluntaria; pero también pudimos ver qué se trata de un proceso radical e irreversible que daña al propio Espíritu y acaba con la Consciencia de la Personalidad para siempre.


El Sufrimiento actúa como si de un tatuaje realizado con fuego se tratase. El Dolor deja marcas profundas que no se pueden olvidar. El desconocimiento de éste hecho y el materialismo a ultranza de nuestro Tiempo, hace que la inmensa mayoría de la Población vea el sufrimiento como algo molesto y que hubiese que erradicar a cualquier precio.


Debemos de aprender a vivir con el dolor; ya no digo que a diafrutarlo, aunque haya unas pocas personalidades que han aprendido a convivir con el dolor y a disfrutarlo. No, nosotros no decimos que tengamos que convertirnos en masoquistas que consiguen mayores orgasmos mientras más sufrimiento y dolor se les infrinja; tan solo aportamos una información precisa de lo que es el dolor desde un punto de vista Rosacruz.


Tenemos que aprender a convivir con el dolor del mismo modo que lo hacemos con el placer. Simplemente debemos de aceptarlo como un Bien para el futuro de nuestras almas, dado que así nuestro Espíritu lo ha determinado. La Personalidad, en casi ningún caso es capáz de comprender los designios escritos, por su Espíritu, en su Destino; pero si despertase podría comprender que ese sufrimiento temporal repercutirá muy favorablemente en el futuro de su Alma inmortal.


Todos en algún momento o hemos pasado por dolores ulcerosa, de muelas picadas o vertebrales en diferentes lugares de la espalda. Algunas veces los dolores son tan terribles que ni las drogas más poderosas pueden aliviar os sin producir terribles efectos secundarios, peligrosos para la integridad del Alma 


En absoluto estamos diciendo que no combatamos con fármacos o remedios naturales para combatir el dolor, sino que debemos de permanecer receptivos para aprender aquello que el sufrimiento nos trata de enseñar. Quizá no esté diciendo que debemos de permanecer reposando en cama o que debemos retirarnos, a nuestro más profundo interior, en Meditación. 


El sufrimiento y el dolor encallecen el Alma y la hacen más fuerte y resistente. 


Sentíamos que en nuestra Lección Anterior no habíamos explicado, en toda su profundidad, por qué la Eutanasia como método de acabar con el sufrimiento no es una buena idea, sino que, por el contrario es no solo el fin del sufrimiento sino también de nuestra existencia como seres conscientes porque el Sufrimiento, el dolor en nuestras vidas, aunque no seamos capaces de recordarlo, los hemos colocado nosotros mismos en nuestras vidas y por un motivo muy consistente: El aprender determinadas


lecciones y que sin el dolor serían muy difícil de digerir y, probablemente, quedaría. grabadas de forma superficial.


El Dolor y el Sufrimiento lo elegimos nosotros mismos mucho antes de nacer para que sirva como una suerte de sello lacrado, con fuego, para permitir que determinadas experiencias queden fijadas para siempre, impidiendo que así pudieran olvidarse.


Los caminos marcados por nuestro Espíritu divino son inescrutables para la consciencia de nuestra Personalidad; pero debemos de entender, con claridad, que nuestro Espíritu, por muy cruel que pueda parecer, en ningún instante desea nuestro mal. El nos conoce mucho mejor que, como Personalidad, nosotros mismos y conoce cuanto dolor podemos soportar y cuáles son los límites que provocarán nuestra rotura personal.


Las almas que conocen lo anteriormente expuesto se convierten en resistentes a todas las miserias y calamidades de la Vida, pues es consciente de que ese pequeño dolor temporal es relativo y servirá para fortalecer el carácter de su Personalidad; es decir, de una parte importante del Alma.


Aceptemos el sufrimiento que la vida nos depare como una bendición desconocida y no como un castigo. Recuerden el dicho antiguo de los profesores: La Letra con Sangre Entra.


Sin llegar a convertirse en descerebrados masoquistas, aprendan a enfrentar al dolor aceptándolo y no resistirlo enfrentándonos. Aprendamos a descifrar el mensaje oculto de nuestro sufrimiento y aprendamos que el dolor nos puede prevenir de peores males, como el dolor que hace que retiremos nuestro dedo de una cerilla ardiendo 

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El Huir del Dolor y del Sufrimiento no solo es signo de una Personalidad cobarde, sino también de un Alma no madura e imprudente.


Aralba Pensator Minister (Frater RC)