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viernes, 22 de octubre de 2021

Lección 56, Cuarto Grado, Primera Orden

 Cuarto Grado Primera Orden "Filósofo":

"Amor a los Cuerpos"


Rebelándose contra el condicionamiento Social establecido


En nuestro contexto de educación judeo cristiana, más bien domesticamiento y manipulación, a los ciudadanos se nos ha echo ver el Cuerpo como algo pecaminoso. Recordad que en la Teología se equipara en peligrosidad para pecar a la Carne con el Diablo.


Ciertamente vivimos en un Mundo cuya Ley Natural tiende a la degradación y a la corrupción. Esto es algo que no solo podemos observar en la decrepitud de nuestros cuerpos cuando se llegas la ancianidad; sino también en todas las otras facetas de la Vida y que no tienen que ver con las características propias de la carne, tendente a la descomposición.


Lo anterior es un hecho que a nadie se le ocurriría poner en duda. No dudamos de que, como Especie, la Humanidad siga un Proceso hacia una mayor perfección, tengo miserias dudas; pero una vez que el Individuo nace y llega al clímax de su edad adulta, solo le queda el camino de una involución retrógrada que, de un modo u otro, lo conducirá a la Tumba.


Pero debemos de observar nuestro entorno natural, así como el comportamiento de los seres vivos que, en éste Mundo, nos acompañan como viajeros de la Vida. 


En primer lugar, estamos hablando para iniciados de un determinado Grado, el Pecado es una entelequia inexistente. Existen los delitos contra las leyes naturales que son otra cosa. El Ser Humano no está capacitado para ser Juez a éste respecto, dado que hay asuntos que parecieran un contra la Naturaleza y,sin embargo, bajo determinadas circunstancias, esas conductas se generalizan, demostrando ser consecuencia directa de las leyes naturales.


Los etólogos, una suerte de psicólogos de los animales salvajes, nos demuestran cada día, con sus investigaciones, que los considerados, por la Religión, como actos aberrantes y contra nátura, se convierten en algo natural cuando las especies, la humana entre ellas, son sometidas a circunstancias límite y muy especiales y que, sin embargo, en nuestro días día vemos cómo algo natural y aceptado por la Sociedad.


Existen ciertas aberraciones del comportamiento Social, que terminan siendo el disparador de algunos de los denominados como funcionamiento anti natural.


Los seres humanos vivimos completamente desconectados de la Naturaleza al convivir en inmensas urbes densamente pobladas, lo que hace a nuestro Instinto de Especie que actuemos del mismo o parecido modo a cualquiera de las otras especies cuando son sometidas, mediante la experimentación, a esas situaciones extremas de convivencia.


Los seres humanos, en general, están convencidos de que su homosexualidad es una decisión libre y personal; pero la investigación de las leyes naturales nos demuestra que esto no es así. El Instinto, por lo tanto,es tan poderoso en el Ser Humano como en otros grupos de mamíferos. En determinadas islas, las especies y los propios habitantes humanos reducen su población y su estatura para poder adecuarse a los recursos disponibles. El canibalismo, hasta hace muy poco, fue un factor de control de la Población entre ciertas comunidades indígenas, la homosexualidad o la deshumanización de los padres hacia su progenie no dejan de ser la misma cosa. Es la propia Naturaleza la que nos redirige hacia ciertos comportamientos para contrarrestar las aberraciones provocadas por la Especie al haberse circunscrito a espacios o territorios reducidos que han sido sobre explotados por la densidad de la Población.


El Ser Humano es un Ser al que se le supone cierto nivel de Inteligencia y, por lo tanto, es libre de decidir dejarse llevar por la corriente instintiva de la Especie o tomar sus propias medidas, por ejemplo, huyendo de las grandes ciudades para afincarse en aldeas abandonadas o en pueblos a punto de desaparecer o incluso, comprando un terreno en algún lugar deshabitado y construyendo allí su residencia.


Pero el Mundo está diseñando de forma aberrante y hace que nuestro comportamiento, a medio o largo plazo se convierta, también, en aberrante; pero, ojo, se produce de un modo absolutamente natural como una suerte de contrapeso para


contrarrestar las desviaciones naturales; es decir, unas desviaciones controlan las desviaciones de sentido contrario y, así, nos creemos que somos los amos del Mundo y que somos los amos y señores de nuestro comportamiento, lo cual, hemos visto, que no es así.


Tenemos, como seres espirituales, un vehículo de manifestación temporal, nuestros cuerpos, que debemos de cuidar, limpiar y proteger si queremos que nos dure, su tiempo de funcionamiento, con su máxima calidad de vida posible; pero el Cuerpo, sin ser agredido, también puede ser fuente de placeres gratificantes, de forma solitaria o colectiva y nosotros, negamos rotundamente que sean o pecado o delito contra las leyes de la Naturaleza. Si algo nos proporciona Placer y no nos produce daño a medio o largo plazo es bueno y no solo podemos, sino que debemos de disfrutarlo para adquirir determinadas experiencias.


La cuestión es que todo lo relacionado a nuestro cuerpo y a los cuerpos de terceros debe de ser realizado con exquisita delicadeza y llevados por el amor más trascendente. Nuestro Cuerpo, como el Mundo en el que vivimos son fruto de un error cósmico; pero eso no quiere decir que debamos odiar al Mundo y a la Carne cono si del Diablo se tratase; un Diablo que, por otro lado, no existe como una Entidad Personal e Individual, dado que se trata de una característica disociativa de todos los seres vivos; pero especialmente amplificada en la Especie Humana. Una Especie que busca, por miedo, la concentración en grandes números de individuos; pero cuyas consecuencias son catastróficas para la propia especie, al reducirse, a medio plazo, la natalidad de la Especie y tan importante para su propia supervivencia. 


Por lo tanto, los estudiantes de la Gnósis, sin realizar proselitismo de algún comportamiento en particular, deben de ser los adalides de la Libertad del Individuo por sobre los dogmas trazados por los diferentes Grupos de la Especie. La Humanidad somos un único Ser; pero estamos fragmentados en éste nivel de existencia para adquirir experiencias personales relacionadas con la individualidad. Si el Grupo impone leyes para coartar la libertad personal no es que vaya en contra de las leyes de la Naturaleza, sino que va en contra de la Ley del Espíritu. ¿Quien soy yo para decidir el comportamiento correcto o erróneo de nadie, cuando, cada cual, posee su Espíritu Individual que lo gobierna como mejor le viene en gana?


La Libertad, guiada por el Amor, debe de ser nuestra única Ley de Vida sin importar credos o dogmas o leyes humanas que nos intenten condicionar para tergiversar nuestra Libertad Personal. Ninguna Ley colectiva escrita por Grupo alguno, puede estar por encima de la Suprema Ley, no escrita, del Individuo y que deviene directamente del Espíritu Eterno e Inmortal.


Desde aquí no queremos incitaros a que abandonéis las grandes ciudades para que habitéis como ermitaños en la soledad del Campo o la Montaña. No queremos influir en vuestro comportamiento social, entre ellos el sexual, con vuestros semejantes. Tan solo queremos que abráis los ojos a la Verdad, para que no seáis, nuca más, sometidos por los grilletes de la mediocridad establecida.


Vosotros sois los únicos amos de vuestra vida y estáis obligados no solo a alimentar y darle protección a vuestro Auto, el Cuerpo, sino que también estáis invitados a procuraría la experiencia placentera, con ellos, son la interferencia de descerebrados ignorantes que quieren dirigir vuestras vidas mediante infinidad de normas y condicionamientos.


Sé, me consta, que es muy difícil romper las cadenas del condicionamiento educativo y social; pero hagáis lo que hagáis, a partir de ahora, será vuestra decisión personal; pero no os atreváis a juzgar los actos que toman los demás en libertad.


Bastante tenemos todos con analizar y juzgar nuestras propias acciones, también tomadas en libertad ¿o no?


Amad a vuestros cuerpos como lo que realmente son: Apéndices temporales de vuestro verdadero Ser Espiritual. No tengáis miedo ni vergüenza a lo que pudieran pensar los demás; pero sobre todas las cosas, no seamos hipócritas al decir o actuar de una determinada manera cuando,en realidad, pensamos de otra forma muy distinta.


No me hagáis ser demasiado escatológico. A buen entendedor, con estas palabras deberían de bastar.


Aralba Pensator Minister (Frater RC)